Durante el presente campeonato mundial en Turquía muchos jugadores han sufrido o disfrutado de la oportunidad de dar la victoria a su equipo con un lanzamiento a canasta. Algunos han aceptado el desafío, otros han eludido la responsabilidad. Unos pocos se convierten en héroes ante sus aficionados, otros se incorporan a las listas de fracasados.
¿Qué distingue a los jugadores que acostumbran a jugarse un tiro decisivo?
En primer lugar, su liderazgo dentro del grupo. Es el grupo (entrenador y compañeros de equipo) el que escoge a los hombres más adecuados para las situaciones críticas de un partido, aquellos en los que confía por su capacidad profesional, puesta a prueba y demostrada en otras tantas situaciones difíciles. Un entrenador sabio procurará escoger siempre al jugador que tiene el respaldo de sus compañeros, evitando apuestas arriesgadas. Un jugador prudente, evitará tomar la responsabilidad si no es con el respaldo de sus compañeros.
En segundo lugar, una actitud mental orientada hacia el éxito, eso significa que valora la responsabilidad de lanzar como una oportunidad, no como una amenaza; es decir, disfruta con el reto en lugar de sufrir la ansiedad por el resultado del mismo; por último, tiene el coraje y la entereza moral para aceptar la derrota, y las consecuencias negativas de un posible fallo.
¿Qué consejo dar desde la psicología del deporte para incrementar las posibilidades de acertar semejante tipo de lanzamiento?
En los momentos previos al partido, tener una actitud positiva, es decir disfrutar, reconocer que a lo largo de su carrera profesional se ha estado preparando para el desafío que representa la competición deportiva, y estar dispuesto a aceptar el fracaso. LLegado el momento del lanzamiento, centrar la atención en el juego, en aquello que le va a situar en mejor disposición para acertar su lanzamiento, en lugar de divagar sobre lo que pasará si acierta o falla.
¿Qué determina el éxito o el fracaso de un deportista?
El verdadero deportista triunfa cuando se esfuerza al máximo durante su preparación, cuando durante el partido intenta hacer todo lo que está en su mano por alcanzar la victoria. Esta forma de entender el éxito ayuda a afrontar la ansiedad inherente a toda competición.
El deportista que se valora sólo en función del resultado, es decir, de si gana o si pierde, se sentirá frustrados y fracasado a menudo, a la larga la insatisfacción acabará por disminuir su rendimiento deportivo.
Ahora imagina por un momento que estás en la pista, el entrenador diseña una jugada para que puedas dar la victoria a tu equipo, tus compañeros te dan palmadas en la espalda, ¿qué piensas? por tanto, ¿qué sientes? Finalmente ¿vas a encestar?